jueves, 22 de marzo de 2012
Flatland (Rick y Darla)
martes, 20 de marzo de 2012
Fragmentos.
Me acuerdo de los veranos en el Coto. ¿Cuántos tenía? ¿Ocho, nueve, diez años?
Me acuerdo de los chicles de miel, de los desayunos, del invernadero; me acuerdo de las cabañas de madera, de la 8 y la 8 bis, y de que todos queríamos la de la piscina porque era grande e importante y porque estaba lejos de la de los monitores. Me acuerdo del observatorio, de la gimnasia matutina, de los herbarios, de los osos que jugaban en la bañera, del taller de velas, de las duchas, de que nunca me apetecía ir a la piscina porque había poca hierba y era áspera, y porque no me gustaba estar en bañador.
Me acuerdo del spray anti mosquitos, de las medallas, del día en que se escapó un ciervo y nos lo encontramos en medio de la plaza, mirándonos con ojos redondos. Y del Aula Magna, de cuando vinieron los malabaristas, de las canciones que teníamos que aprendernos para el último día. “Estamos en el coto escolar, porque León mola cantidad. Si quieres divertirte ven aquí…”, y siempre había alguien que decía “coto” cuando solo tocaba dar palmadas, porque en el fondo quedaba mejor decirlo dos veces… Sigo revisando esos veranos, y me acuerdo de cómo la gente empezó a cambiar, de cómo a las niñas les entraba la risa tonta e iban a hablar con los chicos y a mandarles cartitas, y de las veladas, y de que siempre he odiado y odiaré salir a hacer el ridículo delante de un montón de extraños. Pero otras noches, las buenas noches, cantábamos y mirábamos las estrellas. Me acuerdo de que aún éramos una generación sin móvil y nos llamaban por megafonía para hablar con nuestros padres por teléfono, del día del fuego de campamento, de “Quiero ser bombero”, de aquella noche en la que casi no podía respirar, de la primera vez que me callé durante una discusión y le di la razón a un adulto aunque se equivocaba, porque sabía que no me iba a escuchar. Los niños no hacen eso, y me di cuenta y pensé “vaya…”, y me pregunto si eso fue el principio de algo, y por qué a veces sentimos que es mejor morderse la lengua.
Me acuerdo del día que llegaban los padres, de la bandera, de las actuaciones, del intercambio de números de teléfono aunque nunca, nunca nos llamábamos. De los caballos, de cuando hicimos pan. De cómo cinco días parecían semanas y de que pasa el tiempo y he vivido y no vivido tantas cosas pero no puedo volver atrás a por ellas. Me acuerdo de Alba, con el pelo más corto, con el mismo corazón.
viernes, 16 de marzo de 2012
A Thursday in the life
Me encantas, eres tan mordaz. He fracasado totalmente contigo. Ya sé que a ti te da igual todo. Eres la mejor. Esto parece un psiquiátrico. Vamos a sacar los trapos sucios de Alba... porque eres la chica misteriosa. Me parece muy mal que no te emborraches. Es mi puto sueño. ¿Cómo son los canis ingleses? Casi lloro leyendo tu blog. Soy tú. Te voy a echar mucho de menos. Tía, pues vete a vivir a Inglaterra. No sé qué hacer con mi vida, no sé que hago estudiando algo que no me gusta. Alba es un nombre fácil de pronunciar cuando estás borracho. Me gusta tu cazadora, es muy redonda. Mira qué normal estás, eres lo peor. La gente solo se emborracha porque es la única manera de ser honestos consigo mismos. ¿Por qué eres la única que mantiene la dignidad? Me caes muy bien, pero no de puta madre. Venga, uno de absenta negra. Pues haz algo de borracho si tienes cojones. Necesito saber por qué. Vamos a bailar como Pocoyó. Lo único importante en esta vida es ser feliz.
(Cosas que me han dicho el jueves por la noche.)
martes, 13 de marzo de 2012
Dos canciones, una idea.

You always seemed so sure
That one day we'd be fighting
In a suburban war
your part of town against mine,
I saw you standin' on the opposite shore.
But by the time the first bombs fell
We were already bored.
Quien dice guerra dice hacerse mayor, y quien dice suburbios dice aquí y ahora, en la sociedad del todo y de la nada. Crecer y no perderse a uno mismo, la verdadera guerra, la  nuestra. Un bando o el otro, los vencedores o los vencidos, los que se dicen adiós o los que se aferran a todo lo que son y han sido y dicen no, no quiero, no quiero un mundo que me pide que llegue a ser alguien en lugar de llegar a conocerme a mí mismo. El mundo que te nubla la vista, que te susurra, que te convence para que dejes de sentir, y cuando te quieres dar cuenta no sabes dónde estás ni cómo has llegado hasta ahí y, por supuesto, se te ha olvidado el camino de vuelta.
They keep erasing all the streets we grew up in
Now the music divides us into tribes
You choose your side, I’ll choose my side
Y si, llegado el momento consigues volver, lo que te encuentras no se parece en nada a cómo era antes, a lo que tuviste y has perdido. Irremediablemente. En el tiempo.
Kids wanna be so hard       
But in my dreams we're still screamin' and runnin' through the yard.
***
Now the music divides us into tribes            ___....
 You grew your hair so I grew mine
 You said the past won’t rest
 Until we jump the fence and leave it behind
Reconozco abiertamente que a veces tengo miedo, y frío. Miedo de despertarme un día y darme cuenta de que estoy viviendo la vida de otra persona, y frío cuando siento que mis propias decisiones podrían -pueden- hacerme llegar a esa situación, y tener los sueños tan atrofiados que no me importe. Tengo miedo de tener miedo.
Sometimes I can't believe it        ____
I'm movin' past the feeling.
Sometimes I can't believe it
I'm movin' past the feeling again.
Me revuelven el estómago –y el alma- el vacío, la duda, el conformismo, la idea de consumirse lentamente en la cadena (de montaje). Elige una carrera, ¡corre! CLICK, SIGUIENTE. Estudia un máster. CLICK, SIGUIENTE. Busca un trabajo. ¿Quién dijo nada de realización personal?, ¡corre!. SIGUIENTE. Trabaja, arrástrate cada día y sueña con jubilarte y hacer todo lo que quieres. SIGUIENTE. Jubílate, y desea haber hecho mucho más antes porque ahora estás demasiado viejo, demasiado cansado, demasiado tarde. SIGUIENTE. Nada.
No digo que ese sea un mal camino –lo más difícil de esta vida es, creo, vivir, y yo no juzgo el camino de nadie. Pero lo es si no eres feliz, si cada paso te consume por dentro, si tus ilusiones se vuelven desilusiones, una carga en tu conciencia.
So can you understand
Why I want a daughter while I'm still young?
I wanna hold her hand
And show her some beauty
Before all this damage is done.
Yo lo único que quiero… lo único que quiero es tener derecho a dudar, a dar vueltas en círculos, a perder el tiempo, a equivocarme en mis elecciones y volver a empezar con decisión, a encontrarme a gente maravillosa durante el viaje, y oír muchos hasta luego (porque es inevitable) pero jamás un adiós. Derecho a no tener mi futuro decidido a los dieciocho, a los diecinueve, a los que haga falta, a ser capaz de hacerlo en cualquier momento. A ver el mundo en su totalidad y que la emoción me haga un nudo en el estómago ante el simple hecho de estar viva y por la belleza y las posibilidades que hay a mi alrededor. De reanudar el camino tantas veces como sea necesario, riendo, llorando, pero que, cuando se me arruguen la cara y la vida y el pelo se vuelva blanco y el futuro más pequeño, pueda mirar atrás y sonreír porque cada paso dado ha merecido la pena.
Now the cities we live in could be distant stars                      
 And I search for you in every passing car.
